28 de junio de 2010

Sobre darle los buenos días a la angustia

Pupé Sordi vive con Meme y Sisi en un departamento interno con puerta irregular y ventanita que de a ratos deja entrar la luz del sol, aunque sea de noche. No es una vida solitaria la de Pupé: es una vida diaria. Los sábados y domingos (y durante las vacaciones de invierno todos los días) trabaja como maestra de ceremonias en Caracachumba a la carta en el teatro Metropolitan, y hoy además dio con el hombre elegido, Ringo, un gordito de sonrisa imperturbable que como ella tiene dos dientes separados; cómo dio con Ringo y como fue que logró llevarlo a su casa no es algo que se deba decir ahora (quizás lo raptó o lo robó, pero lo cierto es que Pupé Sordi no piensa devolverlo). Mañana ya veremos qué pasa con el amor y si esta relación que ha nacido establecerá una comunicación fluida entre sus almas. Por lo pronto se interpuso Mimi y la angustia, como una sombra de la propia tristeza, le arranca una canción a Pupé que el maestro Beto tan bien toca al piano y que a ella no le preocupa cantar en inglés o en castellano porque las palabras no importan, son azules.
La realidad es ridícula si uno se sienta a analizarla. Por qué pasan las cosas de la forma en la que suceden más que por una mera contingencia es también por el fruto de los errores que cometemos. Esa ridiculez de la realidad ha dejado de asombrarnos, y confrontarla a través de un texto teatral a veces no nos resulta efectivo. Por eso esta crónica diaria de la vida de Pupé Sordi resalta entre otras tantas colgadas de las marquesinas de la calle Corrientes: Pupé Sordi no nos cuenta su vida, nos la revela. Y esa revelación nos deja desnudos, estupefactos, tan vapuleados al vernos amorfos contra la pared y al descubrir que al volver a casa también nosotros hablamos con Compu, con Tele o con Camucha si no tenemos otra gente a quien decirle chau, hasta mañana. Pupé Sordi existe, claro: es el alter ego de Violeta Naón en SIENTO POR ELLA. Existe porque es su payasa interior, el pedazo de poesía que Violeta como actriz nos ofrece cuando la vamos a ver, el tiempo que se toma para contarnos los íntimos secretos de una muñeca que escondió la zozobra detrás de unos ojos asombrados y que como única armadura utiliza sin vergüenza una encarnada nariz roja.


SIENTO POR ELLA, escrita y dirigida por Violeta Naón. Escenografía: Juan Niño. Iluminación: Osvaldo Ponce. Vestuario: Paola Delgado. Intérprete: Violeta Naón. Domingos a las 21. Belisario Club de Cultura, Corrientes 1624. 4373-3465
Y sí, es cierto, no es una mera minificción en la crónica anterior: Violeta y Pupé Sordi también actúan en CARACACHUMBA A LA CARTA, el espectáculo con versiones renovadas de sus canciones clásicas que el grupo Caracachumba (Florencia Steinhard, Marina Sauber, Silvio Cattaneo, Javier Estrin y Pablo Moral) presenta este año los sábados y domingos (y durante las vacaciones de invierno todos los días) a las 16.30 en el teatro Metropolitan, Corrientes 1343. 5277-0500

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