Argentina, 2010. Escrita y dirigida por Delfina Castagnino. Producida por Iván Eibuszyc y Felicitas Soldi. Fotografía: Soledad Rodríguez. Intérpretes: María Villar, Pilar Gamboa, Esteban Lamothe. Competencia Internacional
La película comienza donde otras usualmente terminan: las dos amigas conversan en la montaña, de espaldas a cámara, charlando de sus cosas, lejos del mundo, en plano entero con las montañas de fondo y la imagen de las chicas en foco rabioso, una bellísima vista de pasmosa confianza. El final es en el bosque, a ras del suelo, con las amigas de frente a cámara en plano general, interferidas por algunas ramas o algunos troncos, con foco tibio y con cierta inseguridad en los bordes del cuadro. El final perfecto a una historia breve, interior, diáfana en sus objetivos y donde lo técnico no es lo importante porque se subordina al relato. Delfina Castagnino no hizo cine de mujeres con LO QUE MÁS QUIERO, hizo cine femenino, y lo demuestra a través de la tersura de su mirada, la complejidad de su puesta de cámara y la consecuencia con sus personajes. Una película sobre la madurez que emociona cuando decantan esas imágenes de Bariloche en verano y recordamos el dolor en los ojos de Pilar Gamboa y la infinidad de matices en el cuerpo de la estupenda María Villar.
Francia/Chile, 2009. Escrita y dirigida por René Ballesteros. Producción: Le Fresnoy. Fotografía: Severine Pinaud, Jacques Loeuille, Enrique Ramírez, René Ballesteros. Montaje: Catherine Rascon, Marina Mellande, René Ballesteros. Competencia Internacional
Hace casi treinta años Margarita, la madre de René Ballesteros, abandonó a su esposo, dejó a sus hijos al cuidado de la abuela y se fue de Chile para no volver; sus hijos la recuerdan en fragmentos, y esos fragmentos incluyen el timbre con el nombre del padre y el de Margarita tachado en la coleccion incompleta de los minilibros de la editorial Quimantú, la editorial de Allende como se cuenta aquí, libros desaparecidos que no son metáfora del terrorismo de estado sino consecuencia de una sociedad fracturada. Quizás sea una película donde lo privado y lo histórico se desbalanceen y no alcancen a intersectarse, y tal vez esté muy apoyada en sus intenciones que en su concreción cinematográfica.
Hace casi treinta años Margarita, la madre de René Ballesteros, abandonó a su esposo, dejó a sus hijos al cuidado de la abuela y se fue de Chile para no volver; sus hijos la recuerdan en fragmentos, y esos fragmentos incluyen el timbre con el nombre del padre y el de Margarita tachado en la coleccion incompleta de los minilibros de la editorial Quimantú, la editorial de Allende como se cuenta aquí, libros desaparecidos que no son metáfora del terrorismo de estado sino consecuencia de una sociedad fracturada. Quizás sea una película donde lo privado y lo histórico se desbalanceen y no alcancen a intersectarse, y tal vez esté muy apoyada en sus intenciones que en su concreción cinematográfica.
Singapur, 2010. Escrita y dirigida por Liao Jiekai. Producida por Lyn-Anne Loy y Tan Bee Thiam. Fotografía: Looi Wan Ping. Montaje: Liao Jiekai, Looi Wan Ping, Tan Bee Thiam. Intérpretes: Oon Yee Jeng Rachel, Yeo Shang Xuan, Ong Kuan Loong. Competencia Internacional
Poco importa el aparente hermetismo de su relato. Las imágenes de RED DRAGONFLIES cuentan mucho más que una historia sobre el fin de la infancia; hablan del tiempo y de los sueñoss, de la vigilia y la duermevela y de las libélulas rojas cuyo aleteo en nuestras manos solamente nos impula a ser más libres. Un poema visual exquisito.
Argentina, 2010. Escrita y dirigida por Clara Picasso. Producción: Campeón Cine, Universidad del Cine. Fotografía: Fernando Lockett. Montaje: Andrea Santamaría. Intérpretes: Ana Scannapieco, Ignacio Rogers. Competencia Argentina
Película cuya eficacia se desinfla a medida que se acerca el final, que promete más que lo que cumple y con una malicia en la última escena que es una pena que no la transforme en algo más sofisticado.
España/Paraguay, 2009. Escrita y dirigida por Renate Costa. Producción: Marta Andreu. Fotografía: Carlos Vasquez. Montaje: Nuria Esquerra. Competencia Internacional
108 fueron los homosexuales que la dictadura de Alfredo Stroessner encarceló, reprimió y condenó por medio de listas públicas repartidas durante años en el Paraguay en sus escuelas, iglesias, dependencias oficiales... Y 108 fue el número que los vecinos quitaron de sus casas, una cifra mala palabra vergonzosa y humillante. Uno de esos 108 fue Ricardo Costa, o Héctor Torres, o Ricardo Héctor Costa Torres, quien apareció muerto en su casa, desnudo y sin ropa en el ropero, el tío de Renate, el hermano que Pedro no pudo rescatar del infierno de la homosexualidad, el hombre que consiguió desdoblarse en dos pero que nunca pudo ser uno. CUCHILLO DE PALO es el sentido homenaje que su sobrina le tributa, un documental que sin embargo no está hecho para recuperar la imagen difusa de Ricardo sino para alumbrar el lado oscuro de la recién pasada realidad latinoamericana.
México, 2009. Guión, fotografía, montaje y dirección de Pedro González-Rubio. Producida por Jaime Romandía y Pedro González-Rubio. Intérpretes: Jorge Machado, Natan Machado Palombini, Roberta Palombini, Néstor Marín "Matraca". Competencia Internacional
ALAMAR es un film extraño porque parece quedarse a mitad del viaje pero de repente deja satisfecho el corazón cuando una garza silvestre pretende domesticarse. Película cuyo conflicto es una despedida que en todo su metraje resulta una gozosa llegada, y que le habla a los hijos y a los padres con la voz del mar eterno, y que transcurre sin ceremonias, ni zozobras ni profundas emociones.
Bonus track - 31 DE ABRIL
Chile, 2009. Guión, producción y dirección: Víctor Cubillos P. Fotografía: Enrique Stindt, Cristián Rojas. Montaje: Víctor Cubillos P. y Jaime Gándara. Intérpretes: Manuel Cubillos, Vera Puelma, Leonardo Cubillos, Tomás Cubillos, Cristián Cubillos. Panorama
Si hubiera sido adolescente en los '90, ¿hubiese tenido una cámara de video? ¿Hubiera registrado experimentos con mis amigos, como El Vengador Impotente? ¿Se me hubiera revelado la franja que divide el documental de la ficción? ¿Hubiese vivido rodando? ¿Y eso habría sido la felicidad? En mi caso no lo sé, pero sí es evidente en el caso de Víctor Cubillos P., ese muchacho que murió en Alemania y que hoy su hermano Cristián homenajea celebrando su vida, guardada en forma de VHS con prolijos marbetes en un ropero que la preserva junto a los grandes clásicos. Es que uno puede vivir tranquilo y seguro y dichoso en cualquier sitio que tenga una cinemateca, en cualquier lugar del mundo que quepa en un plano cinematográfico y se eternice. Pobre Víctor Cubillos P., ir a morirse así y tan lejos de Santiago, tan lejos de los festivales de fin del verano en el camping, tan lejos del papá que de tristeza se hizo corredor de fondo, y de la mamá que por desesperación se hizo católica. Y de los hermanos, y de los amigos, y de Carolina, que aunque casada con un alemán recuerda los sueños que proyectaban juntos en una pantalla. Pobre Víctor Cubillos P., morirse tan violentamente... Es la vida, qué le vamos a hacer. A todos les ha dejado algo Víctor Cubillos P.: les ha dejado alegría. Y les dejó esta película amplia, generosa y absolutamente falaz.
¿Se puede mostrar el país enmascarado en el que uno vive si ser doliente o condolido? ¿Se puede ser mordaz con la ciudad donde uno ha crecido sin escarnecerla, paseando por las calles del barrio con una tapa de inodoro en la mano izquierda? ¿Se puede uno burlar de la institución familiar sin dejar de amar a los seres queridos? ¿Se puede ser objetivo con el país que uno adoptó para desarrollarse, juzgándolo desde los amigos que uno supo conseguir? ¿Y puede uno burlar la muerte? Sí, claro, uno puede todo eso si aprendió a ser chacotón recortando lo importante desde el objetivo de una cámara. Más que found footage 31 DE ABRIL refuerza la idea de que la historia es un prisma irisado por la experiencia personal, y que uno puede readecuar los hechos sin ser irrespetuoso con la propia verdad. Docuficción, documental de creación, mockumentary, diario filmado, talking heads, cine antropológico, cine etnográfico, videoarte... ¿Una sola película puede ser todo eso? Por supuesto, si se tiene el talento subversivo de Víctor Cubillos P. para desentrañar el pasado, descubrir lo que uno es hoy, y reírse a las carcajadas de frente al porvenir.
Nota al pie: recomiendo que la vean el domingo 18 a las 23 hs., en el Arteplex Caballito 2. Les quedará el mejor recuerdo de este BAFICI 12.
No hay comentarios:
Publicar un comentario